El equilibrio emocional del polígono se sustenta en el blanco.
Pinta, no muy seguido, ni tampoco grandes cosas. Pero esa actividad lo hace ingresar en los parámetros de normalidad que tanto agradan a la gente común.
- que gran tipo, este polígono - dice la vecina.
- buena gente, tan normal si usted lo viera- insisten en el barrio.
Hoy una gota de azul le cambió la pintura de color. Tiene ahora uno que ni se anima a nombrar.Ha perdido el tan mentado equilibrio emocional.
Mira el nuevo color y piensa:
-porque la vida nos pone en estas encrucijadas?
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2 comentarios:
No deje que esos azules le anden cambiando la vida, deberia saber que eso es para renegar.
Besitos.
el polígono tiene esa actitú despreocupada. Ahora todo lo pinta con ese color nuevo y mete la mano en el tarro, se envadurna y hace cada enchastre que ni le cuento.
retribuyo los besos
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