diciembre 07, 2006

Los agujeros del 12

Llegué al pueblo ya entrada la noche.
No había alternativa, debía dormir en la planta de agua.
Abrí la puerta y el guardia dormitaba entre el olor a cloro y el ronroneo de la Tonomac.
El chirrido de las bisagras lo sacó del letargo.
- que hacés por acá? no vendrás a lo mismo que los otros no?
-No, no me interesa. Solo quiero reconstruir la historia- le dije mientras avanzaba para extrechar su mano.
Afuera comenzaba a lloviznar.
- No me vengas con eso de nuevo. Tu tío es el que sabe- me dijo mientras acercaba la pava al calentador.
Le dije que no podía tocar la puerta a esta hora y que iba a tener que aguantar mi presencia por lo menos hasta que sonara la sirena.
Preparó los mates y supe que al final me contaría la historia.

"Yo no tengo ni idea del año. Ya te lo dije, preguntale a tu tío, a él le gustan estas historias y sabe todo lo de Samuel, el tesoro, la Pepa y no se que otras cuestiones que por la zona ya son un mito. No se si fue Gutierrez el que vino primero con una pala y un pico, una noche de luna llena de un crudo invierno; cerca de la proveduría, mas o menos por el km 12. La PM lo sacó carpiendo del lugar. Después fueron llegando otros, todas las noches. Gente con pala y pico, dale que va por toda la zona. Y nunca pudieron encontrar nada, o si alguien encontró algo no se hizo público o tal vez era mentira de que Samuel hubiese escondido su dinero en algún rincón de la finca. Yo nunca fui a buscar, porque nunca terminé de creer esa historia, además pasó tanto tiempo que, si es que fue cierto, alguno ya se encargó de encontrar y de gastar esa guita.Samuel estaba a cargo del negocio familiar de la cría y venta de mulas, ahora ya no se usan, hay trenes, camiones, para que queres mulas? La cuestión es que dicen que habían vendido una buena cantidad y eso era un toco de guita. La esposa estaba embarazada casi a término la noche que llegaron los ladrones. Los degollaron a los 2 y dicen que no se pudieron llevar nada de nada. Un peón los encontró agonizando y no había mucho que hacer. Después toda esa historia de que le cortaron la panza a la mujer y nació la Pepa, que la alimentaron con leche de mula, por eso el carácter, no se lo cree ni mongo, vos disculpame"

Seguimos así toda la noche, tomando mate, hablando de bueyes perdidos, hasta que por fin sonó la sirena.Me despedí con otro apretón de manos. Cuando salí, el monte de eucaliptus tenía las marcas de la llovizna.Crucé la calle y fui a tocar la puerta. Salió mi tío con su peor cara diciendo:
- Pelotudo!! me dijiste que ibas a venir anoche!! te esperé como hasta las 2 de la mañana!! pasá, vamos a tomar unos mates.
- No mates no. Invitame un café, cargado, bien cargado.

1 comentario:

MariaCe dijo...

Qué lindo, lindo, lindo.
Me gustó muchísimo.
Gracias por publicar esto, me dio mucha felicidad en esta mañana laboral!
(Por si se tentare, le recomiendo que ni se gaste en visitar mi blog para ver quién lo felicita, mi blog es una porquería)